2009-12-12

La invasión de la Nabarra Marítima. 1173-1204



Sancho VI “el Sabio” (1150-1194) llegó al trono con tan solo 15 años tras la muerte de su padre, el rey García Ramírez. Roma tampoco le reconocía el título de “Rex” (rey) sino como “Dux” (duque) por lo que tuvo que prestar vasallaje a Alfonso VII, para frenar sus ansias expansionistas. En cambio, Alfonso VII, entregaba una serie de villas, el denominado “reino de Artajona” a su hijo Sancho.

Alfonso VII muere en 1157 y su hijo Sancho III en 1158 por lo que el reino de Castilla queda en manos de un niño de 8 años, ante el que no cabía prestar vasallaje. Fue Sancho VI quien cambió la denominación de rey de Pamplona, por la de rey de Navarra. También quien se refirió al euskara como Lingua navarrorum. En 1162 Sancho VI pasa a la acción y reconquista en pocos meses parte de la rioja y la bureba obligando a Castilla a firmar en 1167 treguas por 10 años. También un acuerdo con el rey lobo de Murcia le llevó a conseguir el territorio de Albarracín que dejó en manos de Pedro Ruiz de Azagra.

Con la mayoría de edad de Alfonso VIII, los castellanos con Diego Lopez de Haro al frente, rompieron la tregua y se lanzaron al ataque en 1173 ocupando la bureva y la rioja a excepción de Logroño. En 1174 entraron en Bizkaia tomando el castillo de Malvecín. Otras campañas en 1173 y 1176 les llevaron hasta las puertas de Iruña asaltando el castillo de Leguín.

En 1176 se pidió un arbitraje al rey de Inglaterra, pero éste se limitó a pedir que devolvieran lo conquistado, lo que no contentó a ninguno de los dos soberanos. Un nuevo tratado en 1179 reafirmaba la pérdida de la rioja pero Sancho VI veía reconocida su condición de rey.

El matrimonio entre Leonor de Aquitania y el heredero Ingles, Enrique Plantagenet en 1152 hace que los ingleses entren en estos territorios ocupando Baiona y el resto de Lapurdi en 1177. Esto hace que señores gascones como el de Bearne o Zuberoa, pese a reconocerse vasallos del rey ingles se muestran favorables a Navarra. Otros en cambio como los de las tierras de Ultrapuertos, se declararan vasallos del navarro para defenderse del inglés.

Tras la muerte de Sancho VI en 1194, le sucedió su hijo Sancho VII “el Fuerte”. Intentó la alianza con los Almohades para derrotar a Castilla pero la amenaza de excomunión del Papa y la muerte de su amigo el califa Yusuf, frustraron sus planes para defender Vitoria y con ella Araba, Bizkaia, el duranguesado y Gipuzkoa que fueron conquistadas por las tropas castellanas entre 1199 y 1200. Castillos como los de Treviño o Portilla finalmente tuvieron que ser entregados a cambio de otros en poder de Castilla como los de Inzura o Miranda.

El propio Alfonso VIII reconoció la ilegalidad de su acción, prometiendo en su testamento de1204 devolver parte de lo conquistado. Pero sanó de su enfermedad e hizo caso omiso a su promesa. Ver en 1212 a Sancho VII junto a Alfonso VIII en la cruzada contra los almohades, solo se puede entender, por las amenazas de excomunión y las falsas promesas del rey castellano.

Lo de las cadenas es una leyenda forjada a partir de 1512 para menospreciar el verdadero origen del escudo de navarra, el carbunclo de ocho brazos, muy anterior a estas fechas. Éste iría evolucionando transformándose en barras pomeladas que no serían sustituidas por las cadenas hasta después de la conquista para así alimentar el mito español de la unión de los reinos cristianos. El Arrano Beltza es el emblema personal de Sancho VII “el fuerte”.

A partir de entonces Sancho VII se dedicó a fortalecer el reino y con una buena política de impuestos consiguió varios castillos en Aragón para llegar fácilmente a tierras musulmanas donde conseguir más tesoros. Algunos de estos castillos, como son los de Peña, Xabier y Petilla regresaron a Navarra en 1209 tras estar en manos aragonesas desde 1144.